lunes, 6 de septiembre de 2010

Del Té

 Del Viluas Perdidas
Atribuido a Hawash kluntjes

Encontrabase la tertulia de bajo de la parra, discutiendo acerca de las infinitas e increibles maneras en las que se habia manifestado el fenomeno del té en las diferentes culturas cuando sucedio algo.
Un chaman celta estaba vitoreando a viva voz acerca de las ventajas del samovar, cuando de repente como si una gigantesca mano la hubiera sacudido, la Parra Eclectica tembló y vibró ante los presentes. El temblor duró menos que un instante, sin embargo, todos lo sintieron.
"El viento"- atinó a decir un kurdo nerviosamente. Pero todos sabiamos que eso no había sido.
Temiendo la ira de la Parra, muchos se encogieron y apretaron la mandibula temerosamente, pero en vez de reproches, la espesa paz que precede a la Voz Silenciosa fue lo que los presentes sintieron.
En ese entonces, oyeron sin escuchar.

¿Acaso las infusiones no calientan más que el cuerpo?
o no es cierto que el alma se ve despertada con tan delicados sabores


si hay crimenes serios en la humanidad, uno es el derroche
pues toda gloria es pequeña ante la frescura de una noche


difícil es tal vez entender, que los mas pequeños momentos de felicidad
vienen en una taza de menta y algo de tranquilidad

tan ocupados planeando futuros y de lado dejamos el presente hecho de agua
la enredadera de intranquilidades se convierte así en tundra mental


no discutais entonces, tanto acerca de meticulosidades y detallismos
concentraros igual de fuerte, en el goze y disfrute benigno


Luego de un largo lapso de silencio, en el que todos los presentes meditaron lo aprendido, el té fue vuelto a preparar.
Las opiniones fueron divididas. Algunos decían que era el mejor té que habían probado nunca. Otros afirmaban que era energía convertida en hebras.

Todos lo disfrutaron